El triunfo de Hideki Matsuyama en el Masters tiene el potencial de trascender, dado el probable impacto a largo plazo a nivel internacional de un que golfista japonés gane un major por primera vez. Esto sigue siendo cierto incluso si los primeros ratings de televisión en los Estados Unidos no promulgan ese sentimiento.
Sportico y Sports Media Watch informaron que la transmisión por CBS del domingo atrajo a 9.45 millones de espectadores y un rating por hogar de 5.5. Esas cifras son superiores a la transmisión por televisión de noviembre pasado, que atrajo a 5,59 millones de espectadores y una calificación de 3.4.
Pero ese fue el Masters con el rating más bajo desde 1957, y el torneo menos visto (el conteo se remonta a 1995), mientras luchaba contra el fútbol americano de la NFL. En comparación con el Masters de 2019, celebrado en la fecha tradicional de abril, los números de 2021 son una caída vertiginosa en la audiencia. La edición de 2019, con Tiger Woods ganando su quinta chaqueta verde, tuvo 15,4 millones de espectadores y una calificación de 9,9 (contando la transmisión en vivo inicial y la repetición de la tarde).
Obviamente, se necesita una comprensión del panorama televisivo en evolución. El Masters sigue la tendencia de los eventos deportivos de alto perfil que ven una disminución en los espectadores. Las Finales de la NBA y la Serie Mundial de la MLB registraron mínimos históricos en las calificaciones el otoño pasado, y el Super Bowl experimentó su menos visto desde 2007. Eso también se aplica al campo del golf: el US Open de septiembre se quedó corto con una calificación de 2.0 y 3,2 millones de espectadores.
Además, la transmisión del domingo desde Augusta National no tenía mucho drama. Matsuyama comenzó el día con una ventaja de cuatro golpes, una ventaja que solo fue desafiada brevemente al comienzo de su ronda y cerca del final. El hecho de que Matsuyama y la mayoría de sus perseguidores no sean nombres familiares para los fanáticos que no son del golf no ayudó, ni tampoco la ausencia de atracciones importantes como Rory McIlroy, Dustin Johnson y Brooks Koepka, todos los cuales se perdieron el corte. Agréguele a eso el hecho de que Woods no juega porque se recupera de un accidente automovilístico en febrero. Visto todo, evidentemente al Masters 2021 le faltaban varios ingredientes clave desde el punto de vista de la transmisión.
A pesar de su baja calificación, no todas fueron malas noticias para la transmisión de Masters. La calificación de 5.5 es la transmisión de golf más alta de la temporada, superando al Players Championship. Y Sports Media Watch informó que es el sexto evento deportivo no relacionado con el fútbol más visto desde que la pandemia de COVID-19 provocó una serie de cancelaciones y aplazamientos de importantes eventos deportivos.
Fuente: golfdigest.com
