PEBBLE BEACH, Calif. — En la misma semana en que Michelle Wie West, nativa de Honolulu, se despidió del juego femenino, otro producto de Honolulu, Allisen Corpuz, llegó a Pebble Beach para ganar el Abierto de Mujeres de EEUU que se jugó por primera vez en el legendario campo, y así obtener su primer título de la LPGA.
Corpuz, de 25 años, fue la única golfista del field de 156 jugadores que hizo rondas bajo par los cuatro días del torneo, y el domingo hizo 69 para terminar con -9 y así reclamar el premio de $2,000,000.0000.00, el premio metálico más grande jamás pagado a un campeón de major en la LPGA.
Corpuz ha recorrido un largo camino desde que empezó a practicar este deporte en Hawái como una forma de pasar tiempo con su padre y su hermano los fines de semana. Allí, se enamoró no solo del juego, sino también de la idea de mejorar y pegar más lejos en su driving range local.
«Honestamente, era muy mala y quería mejorar», dijo Corpuz. «Creo que eso es lo que soy como persona».
A medida que mejoraba, Corpuz rompió el récord de Wie West como la jugadora más joven en calificar para el torneo U.S. Women’s Amateur Public Links. Unos años más tarde, en 2014, vio desde su casa cómo Wie West ganaba el U.S. Women’s Open en otra sede histórica por primera vez, Pinehurst.
Fuente: espn.com/golf
