Los abogados que representan al PGA Tour buscan agregar al Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudita y al gobernador del fondo, Yasir Othman Al-Rumayyan, para ser acusados en la contrademanda del tour contra LIV Golf.
En una moción presentada ante un Tribunal de Distrito de EEUU del norte de California, abogados del PGA Tour argumentaron que los documentos producidos recientemente por LIV Golf confirman que el PIF y Al-Rumayyan desempeñaron un papel activo en hacer que los golfistas incumplieran sus contratos con el PGA Tour uniéndose al circuito LIV Golf.
«Como se establece en la contrademanda existente, LIV intencionalmente y con conocimiento de causa, hizo que estos jugadores incumplieran sus obligaciones contractuales con el TOUR al tergiversar los contratos del TOUR, induciendo estos incumplimientos al ofrecer contratos altamente lucrativos que hacen imposible que los jugadores cumplan con sus contratos del TOUR, y proporcionar una indemnización amplia y cientos de millones de dólares para compensar a los jugadores de LIV por estas infracciones. Documentos producidos recientemente confirman que PIF y el Sr. Al-Rumayyan desempeñaron un papel activo y central en la orquestación de estas infracciones para su propio beneficio, y son igualmente responsables por el daño causado al TOUR», escribieron los abogados del PGA Tour en la moción presentada.
En agosto 2022 varios jugadores que fueron suspendidos por el PGA Tour por jugar en torneos de LIV Golf sin el permiso requerido par a participar en eventos en conflicto de calendario presentaron una demanda federal antimonopolio contra el PGA Tour, alegando que estaba usando su poder de monopolio para aplastar a la competencia y desanimar a empresas de Tv, emisoras y proveedores que trabajan con LIV Golf. LIV Golf y tres de sus jugadores son los restantes demandantes en el caso.
El PGA Tour presentó una contrademanda, alegando que LIV Golf interfirió con sus contratos con los jugadores.
Los abogados del PGA Tour escribieron en la moción presentada que LIV Golf, que es financiado por PIF, fue el resultado final de un plan conocido como Project Wedge, que fue «diseñado para proporcionar una hoja de ruta para hacerse cargo del golf profesional como parte del Reino de Visión 2030 de Arabia Saudita». Según los informes, el fondo de riqueza soberana de Arabia Saudita tiene un valor de US$620 mil millones.
Los abogados del PGA Tour alegan que las suscripciones y el acuerdo de accionistas de LIV Golf, que obtuvieron en diciembre, fue el «pilar que demostró PIF y el control total del Sr. Al-Rumayyan sobre LIV y estableció que cualquier contrato de LIV con un jugador requiere autorización por PIF».
«Además de ejercer una autoridad casi absoluta sobre LIV, PIF y el Sr. Al-Rumayyan reclutaron personalmente jugadores del TOUR, desempeñaron un papel activo en las negociaciones de contratos, y aprobaron expresamente cada uno de los contratos de los jugadores, todo sabiendo que estos acuerdos interferirían con los contratos del TOUR y los jugadores», escribieron los abogados del PGA Tour en la moción.
«Además de aprobar los contratos de los jugadores que se comprometen a indemnizar a dichos jugadores por el incumplimiento de sus obligaciones contractuales con el TOUR, el propio Sr. Al-Rumayyan ha ido tan lejos como para brindar garantías personales a al menos un jugador sobre su compromiso y el de PIF para respaldar dicho jugador en cualquier reclamo legal por parte del TOUR».
En mociones anteriores, los abogados de LIV Golf han argumentado que el PGA Tour está exagerando el control del PIF sobre el nuevo circuito. En una declaración jurada, Al-Rumayyan dijo que el fondo solo proporcionó «supervisión de alto nivel» de LIV.
Según documentos judiciales, el PIF posee al menos el 93% de LIV Golf. El ex director de operaciones y presidente de LIV Golf, Atul Khosla, le dijo a ESPN en octubre pasado que el circuito, que es liderado por Greg Norman, gastó más de US$784 millones en gastos operativos durante su temporada inaugural en 2022. Khosla renunció a su cargo en Diciembre.
Los abogados del PGA Tour han buscado sin éxito documentos del PIF y hasta ahora no han podido declarar a Al-Rumayyan, además alegaron en el expediente judicial que el PIF y Al-Rumayyan creen que «ningún tribunal de los Estados Unidos tiene jurisdicción sobre ellos, son inmunes al proceso obligatorio y no tienen información ni documentos relevantes para el caso».
Fuente: https://espn/golf.com
